Pocas veces encontraremos un torneo como la Super High Roller Bowl, que permita que su chipleader llegue a las dos últimas mesas del torneo con más de 200 ciegas -ni que tenga una entrada de 300.000$, pero ese es otro tema-.
La cifra es un poco engañosa, porque Matt Berkey tiene una más que considerable ventaja sobre el segundo, pero es que Erik Seidel y Dan Shak están también por encima de las 100 ciegas y Jason Mercier, cuarto, las supera por media ciega..
Esta madrugada, como la anterior, se jugaron siete niveles. El verdadero despegue de Berkey se produjo en el pénultimo nivel del día, el 13. No debe ser supersticioso. No hubo un momento estelar, un cooler entre chipleaders, una doble eliminación afortunada, ni nada parecido. Supo leer perfectamente una situación concreta contra Tom Marchese y desde ahí construir una torre de fichas que amenaza con llegar al techo del Aria.
La mano en cuestión se empezó a poner interesante con un 3bet desde el botón de Marchese. Berkey abrió pero, al estilo yanqui, no quiso liarla preflop. Dejó que Marchese decidiera que hacer en un flop ::4d y le pagó una apuesta de medio bote porque a pocas manos ayudan esas cartas. Con el del turn, el siguiente check fue para atrapar, Tom concedió medio bote más. Había ya 600.000 puntos en la mesa y Berkey volvió a permitir que Marchese decidiera el tamaño de la auto value, que fue de 384.000 puntos. El jugador de los New York Rounders de la GPL tuvo que enseñar su , que no ganaba a nada. De ahí el farol en river.
Pero, lo que todos nos preguntamos a estas alturas es, ¿quién es este tal Berkey que se ha puesto megachipirón en semejante torneazo? Pues us un caballero al que el estreno de Rounders y el efecto Moneymaker le pillaron ambos en la universidad, donde estudiaba matemáticas e informática. Bueno, realmente intentaba llamar la atención de los ojeadores y dar el salto al profesionalismo en el béisbol.
Cuando dejó la universidad, sin obtener ofertas de las grandes ligas, se vio en la encrucijada de decidir si intentar el camino más difícil en el deporte profesional, desde las ligas locales, o jugar al poker. Ambas actividades exigían reorrer kilómetros y visitar ciudades pequeñas, así que sus inicios como profesional de las cartas fueron en partidas clandestinas montadas por tipos a los que llamabas por un apodo y en las que se podía pasar días enteros jugando.
Esta «academia» le preparó perfectamente para los casinos, en los que encontró mesas fáciles y un horario más ajustado. No destacó en torneos hasta 2013, año en que su nombre sonó para Player of the Year de las WSOP con tres mesas finales y siete cajas en total. Su mayor triunfo aún no tiene medio año, una victoria en uno de los High Roller de 25.000$ que se juegan en el Aria con cierta regularidad.
Berkey probablemente se vea ya en la final, pero cómo fiarse después de ver como se iba desvaneciendo lenta pero inexorablemente el big stack de Timofey Kuznetsov, el chipleader del día 1. Fue una muerte por desangramiento debido a múltiples heridas, de las que la más grave y definitiva fue un flop monocolor que parecía muy bueno para su pero escondía una trampa mortal puesta por Jason Mercier y su .
La lista de eliminaciones de hoy contiene 18 nombres más, entre los que destacan el del campeón vigente Brian Rast, Daniel Negreanu, Dan Colman y Justin Bonomo. Igual de suculenta o más aún es la relación de los que aún están con vida y aspiran a los siete puestos premiados.
- Matt Berkey 2.816.000
- Erik Seidel 1.299.000
- Dan Shak 1.243.000
- Jason Mercier 1.208.000
- Dan Smith 1.152.000
- Bryn Kenney 1.097.000
- Andrew Robl 1.075.000
- Phil Hellmuth 936.000
- Fedor Holz 751.000
- Rainer Kempe 740.000
- Phil Laak 509.000
- Phil Galfond 436.000
- Ben Lamb 415.000
- Bill Perkins 367,000
- Dan Perper 344,000
- Tom Marchese 321,000
Ya ves que quedan solo un par de jugadores de los que jugarán por el primer premio de 5.000.000$ que pidan Google, el habitual de este tipo de torneos especiales Dan Perper -me suena de los Big One for One Drop, por ejemplo-, y el alemán Rainer Kempe.
Bill Perkins y Dan Shak son empresarios de éxito y tienen el dinero por castigo, pero son caras más que conocidas y llevan años jugando más poker que muchos pros. El resto, bueno, el resto es una de las colecciones de depredadores del naipe más completa que hayamos visto, magia blanca y flexiones en medio de un heads-up por el brazalete incluidos.
El anticlímax cuando se corta la conexión es un bajón de cuidado, pero si quieres aprovechar el par de niveles que echan después de la cena en el canal de Twitch de PokerCentral, aquí lo tienes.
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