Inicio World Series of Poker (WSOP) Damián Salas completa la odisea para ganar el brazalete del Main Event...

Damián Salas completa la odisea para ganar el brazalete del Main Event 2020

569

En Caesars quieren creer que cuando los aficionados lean, dentro de unas décadas, la lista de campeones del Main Event de las WSOP, el nombre de Damián Salas no desentonará lo más mí­nimo entre los de otros vencedores de esta década como Ryan Riess, Pius Heinz, Martin Jacobsen o su antecesor en el tí­tulo, Hossein Ensan.

Por méritos del jugador, indudablemente deberí­a ser así­.

Damián Salas se impuso esta madrugada en el heads-up que le enfrentó a Joseph Hebert, en el último trámite de la complicadí­sima estructura que ha dispuesto la organización para rellenar el dichoso hueco en el palmarés.

El argentino primero ha tenido que disponer de una cuenta online en GGPoker para enfrentarse allí­ a un field de 674 jugadores. Alcanzado uno de los nueve puestos de la final, ha tenido que viajar desde Buenos Aires a la República Checa, desafiando una pandemia mundial para ganar una partida de más de 1.500.000$ en el King’s Casino, con rivales como Bruno Botteon, Manuel Ruivo o el español Ramón Miquel Muñoz.

Por último, le ha tocado pelear con las Aduanas de Estados Unidos para poder viajar al casino Rio y terminar de alcanzar el honor de ser el campeón del Main Event de las WSOP 2020 ya entrado el 2021.

Esta partida, en verdad, es de las más crueles que se han visto en el poker. Al ganador le esperaban 1.000.000$ extra, el brazalete dorado y la gloria inmortal. Al perdedor, las gracias por participar -y el cheque millonario de la previa, tampoco exageremos el drama-.

La odisea no hubiera estado completa si el heads-up final no se le hubiera puesto igual de complicado. En la mano 82, Joseph Hebert alcanzó su máxima diferencia sobre Salas, 898.000 a 102.000, con las ciegas en 5k/10k.

El botón pasó a Damián, que envidó con sus 10bb. Hebert intentó rematar por la ví­a rápida y pagó alegre con dkh5. Salas llevaba el as, dac2 y su mano aguantó. Hebert sabí­a que tendrí­a más oportunidades, y volvió a robar ciega tras ciega buscando volver a meter a Salas en la zona roja.

El siguiente all-in fue un empate, pues ambos llevaban la misma mano, QJo. Damián consiguió algo de colchón sin tener que volver a arriesgarse a irse de vací­o después de todo lo que tuvo que pasar para estar allí­. Inclusó esquivó caer por debajo de las 10bb con la subida de ciegas llevándose la mayorí­a de los escasos flops que se vieron en esta fase.

En la mano 136, a puntito de entrar en el nivel 20k/40k, Salas se puso por delante. Solo quedaban 25 ciegas a repartir ente los dos jugadores. Cuando uno se veí­a beneficiado en el balance de walks y push-folds, el otro ganaba el all-in para devolver el equilibrio. Así­ sucedió tres veces, alternativamente, hasta que llegó la mano 173 de la partida.

Hebert, con 390.000 puntos, pusheó dasq. Damián pagó con dksj. El flop empezó a resolver la partida con el sk y el river, ck, confirmó la identidad del campeón del Main Event 2020.

Antes de posar con el brazalete y los fajos de billetes, Salas se echó la albiceleste a los hombros, y enfundado en ella aparecerá en la galerí­a de campeones del torneo en las paredes del Rio, que aún está por ver si se podrá abrir para la edición de 2021. La cosa no pinta del todo bien, por el momento.