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Doug Polk resucita su reto de banca a base de Pot Limit Omaha

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Doug Polk ha recuperado del cajón donde se agolpan sus múltiples proyectos la serie sobre el bankroll challenge, que muchos temí­an abandonada para siempre. Y para bien, porque en solo un par de sesiones ha multiplicado su capital casi por tres y está ya en 2.428$ de los 10.000$ que se habí­a propuesto conseguir partiendo de los microlí­mites con 10 cajas de NL10.

Entre ví­deos de Youtube, labores de comentarista, viajes, torneos y el tiempo que le consume meterse en fregados con sus objetivos favoritos –como, por ejemplo, Tom Dwan-, Polk solo habí­a jugado una sesión del reto en todo lo que llevábamos de 2017.

Toca recapitular, por si hay más memorias frágiles como la mí­a entre la audiencia. A través del canal de Twicht de su página de coach, Polk solicitó a sus seguidores que le ayudaran a decidir la composición de un reto para darle contenido a su programación. Su gente decidió que querí­an ver coo Polk convertí­a 100$ en 10.000$ saliendo de microlí­mites, una tarea que Polk consideró que le llevarí­a unos dí­as, como mucho, un par de meses.

Están a punto de cumplirse ocho meses desde la primera sesión. Primero, Polk se encontró muchos más problemas de los esperados en comenzar a encauzar el reto. Se le atragantaron los microlí­mites, y se le acumuló el chollo. Doug, desmotivado, empezó a dejar de lado las sesiones enfrascado en otros trabajos más acuciantes, como grindar el WCOOP de final de año. Su última sesión habí­a sido el 19 de enero, una sorpresiva reaparición que cortaba una racha de más de un mes sin jugar una sola mano en esta cuenta y que no ha tenido continuación hasta finales de la semana pasada.

Polk siempre tendrá la excusa de que, en número de sesiones, sus expectativas aún pueden cumplirse. Sobre todo porque su gráfica se ha disparado hacia arriba de manera llamativa. En estos dí­as, Doug ha jugado las sesiones 28 y 29 del reto, por lo que podrí­a argumentar que aún no se ha cumplido ni un mes de vida dde la prueba, y su banca se ha propulsado hasta los 2.428$.

Lo que ocurre es que le ha dado sus frutos estirar un poco los parámetros de su promesa de que iba a mantener dentro de los lí­mites de una gestión de banca razonable. Aprovechando su experiencia y calidad, rebajó los requerimientos mí­nimos de cajas para sus shots a las mesas de 0.25$/0.50$, y ha encontrado por fin el hueco por el que asentarse en las nuevas mesas.

Es el Pot Limit Omaha, que le ha reportado buena parte de las ganancias de esta semana. En un principio, Polk retomó el reto con ganas de hacerlo todo según el manual de buenas prácticas de la gestión de banca y empezó jugando torneos de bajo buy-in con los 1.032$ que tení­a, pero no le llevó mucho rato impacientarse y pasarse a las cuatro cartas.

Cogió una racha buena de más de diez cajas de beneficios en PLO50, lo que le animó a lanzar una segunda sesión el pasado domingo en la que se pudo ver al mejor Polk, con cerca de 1.000$ en ganacias provenientes de todos los formatos, NLHE, PLO y torneos.

Ahora que se ha sacudido el mal fario que le provocaban los lí­mites más modestos y el cajero tira para arriba a ritmo de AVE en vez de ferrocarril de ví­a estrecha, imaginamos que Polk estará más motivado para terminar la serie. La discontinuidad en el juego le ha restado algo de brillantez, pero, al ritmo actual, puede dar por conseguido su reto en un número récord de sesiones, que podrí­a haber encajado fácilmente en un mes y medio de juego a buen ritmo. ¿De 100$ a 10.000$ en 35-40 sesiones? ¿Dónde hay que firmar?

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