Los juicios que los diversos perjudicados acabaron reclamando contra el High Roller Ali Fazeli por fraude van a resolverse con la declaración de culpabilidad del acusado.
Fazeli ha reconocido ante un juez federal que ofreció a distintos inversores la oportunidad de especular con el precio de las entradas de eventos deportivos como la Super Bowl y el Mundial, que suben a medida se acerca la fecha del partido, y que luego empleó los 6.200.000$ recaudados en saldar deudas de juego, pagarse la entrada en torneos de poker de buy-ins superiores a los 25.000$ y a gamblear en el casino.
Ya hicimos referencia a este caso cuando se conoció que dos de los estafados eran dos superestrellas del poker mundial; Erik Seidel, que aportó 500.000$ al supuesto negocio de reventa, y John Juanda, al que le estafaron 300.000$.
En teoría, la resolución favorable del juicio por cargos criminales tendrá un efecto dominó en los casos civiles a los que también se enfrenta Fazeli. Uno de los requisitos que incluyó la fiscalía para aceptar el trato para reducir la condena de Fazeli -que se enfrentaba a 20 años de cárcel-, es restituir el dinero a sus inversores, así que Seidel y Juanda deberían poder recuperar el dinero estafado en un futuro cercano.
Sin reclamación monetaria, lo más práctico que podrían hacer todos los que se vieron afectados por la estafa y acudieron a los juzgados es retirar las demandas. Por un lado están los jugadores de poker, agrupados con otro pro, Zach Clark. Luego está el Aria, que reclama 1.100.000$ en crédito impagado; y, finalmente, el mayor inversor de todos, Mel Sembler, un captador de fondos para el partido republicano y ex-embajador que asegura haber aportado 5.000.000$ a la fallida empresa.
Erik Seidel y John Juanda son dos de las grandes incógnitas para el Big One for One Drop que se jugará en el marco de las WSOP. Seidel jugó las dos primeras ediciones del evento y Juanda, aunque su presencia es menos probable, ya ha participado en High Rollers de 100.000$ y 200.000$, como las Triton Series.
