Sheldon Adelson, el multimillonario dueño de los casinos Sands y autodeclarado archienemigo del poker online ha fallecido en Las Vegas a los 87 años de edad, víctima de un linfoma.
La noticia fue hecha púbica mediante un comunicado firmado por su esposa Miriam Adelson en PRNewswire, en el que recordaba a su marido como un hombre de orígenes humildes que obtuvo su notable riqueza gracias a un espíritu emprendedor, un perfil que casa a la perfección con el mito del sueño americano.
Adelson era una figura muy conocida por los aficionados al poker por su relevancia en dos ámbitos muy diferenciados.
Como dueño de los casinos Sands, Adelson convirtió el Venetian y el Palazzo en la sede una de las principales poker rooms de las Vegas. También ha mantenido las mesas del poker en el Sands de Macau, en el seno de una industria que que mira con recelo los metros cuadrados que se comen las mesas de poker frente a juegos más rentables, especialmente para las costumbres de consumo de juego en Asia.
Por contra, Adelson fue radicalizando su aversión al juego online, y en sus últimos años de vida dedicó ingentes esfuerzos e inversiones para impedir que los estadounidenses tuvieran acceso a ningún tipo de oferta de juego en la Red.
La entrada en vigor de la UIGEA y el posterior Black Friday llevaron al poker online en Estados Unidos a una situación casi ideal a ojos de Adelson, que se tomó casi como una afrenta personal la iniciativa del Departamento de Justicia que revisó las implicaciones de la Wire Act y dio vía libre a la vuelta del juego online gestionado a nivel estatal.
El sistema político estadounidense permite a los millonarios aportar fondos y utilizar influencias para promover leyes que favorezcan sus intereses, y Adelson empleó su inmensa fortuna para financiar múltiples iniciativas que buscaban horadar este nuevo status quo inaugurado por los mercados de Nueva Jersey y, especialmente, Nevada, su estado de residencia y donde tenía establecida la sede de su negocio. Atacó en todos los frentes, apoyando las campañas de los políticos con programas más agresivos contra el juego online y todo tipo de plataformas reaccionarias como la que abogaba por una nueva legislación, la Restoration of Americaâ€s Wire Act (RAWA).
El mismo Departamento de Justicia, ahora bajo órdenes de Trump, promovió una apelación ante la corte federal contra la interpretación de la Wire Act que permitió la liquidez interestatal en el juego online. Adelson era uno de los máximos recaudadores para la campaña del controvertido presidente. Se barrunta que la administración que sucederá a la de Trump en la Casa Blanca, presidida por el demócrata Biden, acabará por retirar la apelación.
Aún bajo su mandato, debilitado por su delicado estado de salud, la compañía Sands estaba empezando a mostrar un cambio radical en su enfoque de negocio, que puede significar un antes y un después en el panorama del juego en Estados Unidos. Guiados por la batuta del nuevo CEO Rob Goldstein, los casinos Sands han empezado a vender sus propiedades en suelo estadounidense.
Además de centrarse en el mercado asiático, y por tanto dejar de mirar al juego online en EE.UU. desde el prisma equivocado o no de la competencia directa, la nueva dirección ha empezado a tantear el mercado de las apuestas deportivas online. Quién lo diría, ¿verdad?