A lo largo de mis 40 años como aficionado a este lindo juego, he tenido la suerte de jugar con los más grandes jugadores y también de conocer personalmente a algunos de ellos.
Jugadores como Juanma Pastor, Salvatore Bonavena, Humberto Brenes, Victor Ramdin, Eli Elezra, Ronny Bardah o Jim McCrink, entre otros, forman parte de esa nómina de grandes personas que Dios me dio la suerte de conocer y que, además, me aceptaron como amigo.
Por supuesto, también tuve la suerte de conocer al protagonista de la triste noticia que ayer publicó Poker10. Es impresionante la entereza de este gran personaje, su filosofia y su elegancia en la partida más importante de su vida.
A Chad Brown lo conocí hace muchos años. Su comportamiento en las mesas, su educación y su saber estar no dejan indiferente a nadie. Su juego lo dejo a consideración de los que hemos jugado contra él, pero es importante tener en cuenta que en EEUU está considerado como uno de los mejores Coach de Poker en todas las modalidades.
Hace apenas un par de semanas, un melillense/malagueño como yo, acostumbrado al sol, se perdió en medio del frío y la nieve de Atlantic City para jugar por primera vez un World Poker Tour. Fue en el casino Borgata, al que acudí probablemente más atraído por el recuerdo de la película Atlantic City, tan maravillosamente interpretada por Burt Lancaster, que por el torneo en sí. De todas maneras, valió la pena, tal y como dice la canción, porque pude disfrutar de los comentarios, los análisis y la compañía de mi amigo Chad.
Tremendo torneo el que hizo en el Borgata y tremenda partida la que está jugando contra su enfermedad.
Estoy seguro de que saldrá victorioso de esta partida. No me cabe la menor duda, porque es un luchador infatigable, porque se lo merece y porque personas como él son imprescindibles para dignificar el juego que tanto nos apasiona.
Un fuerte abrazo. Your best friend forever, Yossi.
