El público de High Stakes Poker se tiene que empezar a acostumbrar a la sensación de empezar de cero. Por segunda vez en la temporada, el nuevo capítulo de la serie ha comenzado con una remodelación radical de la plantilla de jugadores.
Es una pena que de tanto en tanto se escape dinero de la mesa. El stack millonario de Bryn Kenney ha desaparecido de la circulación, así como el de los candidatos a jugarse el ansiado bote del 1.000.000$ contra él.
Pero esta vez, los beneficios de la revolución en la plantilla exceden por mucho a los perjucios de un reseteo de caras y stacks, porque las nuevas caras incluyen por fin a dos de los jugadores más esperados de la edición.
Phil Ivey y Phil Hellmuth vuelven a High Stakes Poker, y lo hacen para enfrentarse de nuevo a Tom Dwan, que vuelve a ser el eje central del programa y sigue ocupando su sitio desde el minuto uno de esta edición.
Hellmuth acude al Aria de la mano de uno de los empresarios que comparten su partida privada en San Francisco, Chamath Palihapitiya. En el capítulo de pros, regresa Brandon Adams y se incorpora James Bord. Lázaro Hernández es un jugador y empresario de Florida que ya ha participado en varios programas de Poker Central y Jacob Daniels es un habitual en torneos de High Rollers en Estados Unidos. Con ellos, se completa la fotografía inicial del capítulo 9.
No tardó mucho en darse la reedición de uno de los duelos icónicos del programa, Dwan contra Ivey.
Jugando 400$/800$, Ivey subió a 2.500$ en CO con , Dwan defendió en la ciega pequeña.
El flop trajo un out común, el , y el turn el , después de sendos checks. Dwan dejó que Ivey decidiera si atacar el bote, y le hizo un check-raise de 2.500$ a 10.500$. Ivey pagó, a lo que Phil Hellmuth apostilló: «Classic battle», justo lo que estaba pensando toda la audiencia.
El river solo completaba alguna escalerita al azar , y Dwan metió una value de 21.000$ que Ivey tenía que pagar.
Era el segundo bote que perdía Ivey en el programa, ya se había dejado un par de apuestas con damas contra color flopeado de Jake Daniels, aunque había un par de reyes en la mesa que le ayudaron a foldear ante una overbet en river.
El tercero lo pudo ganar, al fin. Le volvieron a dar damas en HJ y subió tímidamente a 2.000$, lo que animó a formar un bote familiar con Palihapitiya , Dwan ::td: y Adams .
El flop le gustó especialmente a dos jugadores, . Adams chequeó para pagar la continuación de 7.000$ y comprobar que el turn no le completaba el color :kd::. Ivey decidió subir la apuesta hasta 22.000$ esta vez y Adams volvió a pagar, confirmando que algo llevaba. Ivey lo tomó com una señal para usar una cantidad fuerte en el river , y esta vez metió 50.000$. Adams fue capaz de foldear, pero con lo que había en la mesa ya le llegaba a Ivey para ocupar la segunda posición en función de los stacks en juego.
Antes de dar por concluido el capítulo, llegó el turno de ver a Hellmuth jugar un bote contra Dwan.
Siempre se ha acusado a Hellmuth de nitear en el programa. Todos conocen el meme, incluso Phil, así que para conseguir acción para sus en UTG abrió únicamente a 1.600$. Nadie picó con el squeeze, y seis jugadores vieron el flop, que fue ::.2h::.
Dwan tenía top pair y proyecto de backdoor flush y apostó 5.500$ sin posición desde SB, para empezar a delimitar lo que llevaba la oposición. Hellmuth no pudo 4betear preflop, pero la apuesta de Dwan le abrió hueco para un raise a 17.000$ en el flop. Dwan pagó para ver el turn , y Hellmuth le dio carta gratis, el . Ante este river, Hellmuth estimó que la mayor value que podría pagar ahí una jota era de 18.000$, y Dwan le dio la razón. Hellmuth cobró un bote de 80.400$.
El capítulo 9 llegó a su fin con un bote de 176.000$ entre Hernández, que flopeó full en un bote 3beteado y tuvo la suerte de que su rival ligar top pair tras la continuación. y Daniels, que apostó todas las calles y pagó un raise en river.