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El decálogo del bad boy del poker

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Ayer, el blogger Ken Lennaárd, de PokerListings, publicó un artí­culo muy curioso que recoge 10 prácticas poco limpias que algunos jugadores de poker suelen llevar a la práctica, al menos, en algunas ocasiones. Todas ellas juntas conforman el decálogo del auténtico chico malo del poker.

Veamos cuáles son las prácticas recogidas por Lennaárd en su texto.

1. Amenazar a tu rival.

Un oponente (da igual lo fish que sea) te hace cualquier jugada «extraña», te gana una caja o te saca de un torneo y tú, bien tildado, le amenazas con pegarle una somanta de palos. No solo es patético, sino que puedes terminar muy mal, ya que solo aceptará la pelea cuando sea más grande y más fuerte que tú.

2. Tildarse y dilapidar la banca.

No hay peor decisión en el poker que en medio de un tilt, subir de nivel y tratar de recuperar rápidamente lo palmado. El final casi siempre es el mismo: cajero a cero o bankroll destrozado.

3. Retar a un rival a un HU tras perder un bote.

Cuidado con esto. El heads-up es una disciplina muy diferente al NL Cash (da igual que sea de mesa corta o larga), los SNG o los MTT. Aparte de que es penoso ir retando a la gente por ahí­, de nuevo, puede pasarte lo mismo: que solo te acepten el duelo cuando tengan más nivel que túen los HU.

4. Romper cosas de puro mosqueo.

Golpear la mesa, tirar el ratón o el teclado por los aires, pegarle una patada al portátil o lanzar el monitor por la ventana de la habitación no son acciones nada recomendables. Si te mosqueas, para; deja de jugar un rato o hasta el dí­a siguiente. Tómate un descanso. Nadie puede jugar medianamente bien con el estado emocional alterado.

5. Intentar justificar tu mal juego.

Si te equivocas en una jugada, o en varias, no busques razones que justifiquen tus errores; y menos aún, intentes legitimar tu juego buscando la aprobación o la compasión de tus colegas del poker. Peor no se puede quedar… En lugar de pensar en malas rachas o en manipulaciones de software, sé honesto. Analiza tu juego e intenta mejorarlo. De esa forma, la varianza negativa tenderá a afectarte menos.

6. Realizar un falso missclick.

Qué majetes son los jugadores que anuncian por el chat: «Perdón, ha sido un missclick». Luego les suben por detrás y acaban teniendo ases. ¿Vale todo en el poker?

7. Explicar bad beats.

Uffff. Esto es tremendo. ¿A quién le gusta que le cuenten «bad beats»? ¿Quién aguanta al tí­pico que te para en medio de un torneo o te «asalta» por Skype para contarte que le han tirado de la manera más increí­ble de la historia del poker? Además, casi siempre, este tipo de jugadores suelen ocultar información para evitar que los demás sepan que muy bien no han jugado…

[Creo que mi amigo Periquillo llegó a hacerse una camiseta con un letrero parecido a este: «Dame 5 euros y escucho tu bad beat»].

8. Ganar y salir corriendo.

No es nada caballeroso ganar un bote grande y, acto seguido, levantarse de la mesa y largarse con el dinero. La táctica del picotazo la suelen realizar los fishes que no están seguros de poder ganar de forma continuada en un nivel concreto.

9. Intentar engañar a los rivales perdiendo tiempo deliberadamente.

Retrasar de forma desesperante una decisión para intentar engañar a un rival no es algo limpio ni recomendable, sobre todo, porque si lo haces con mucha frecuencia, puedes acabar poniendo en tu contra a todos los jugadores de la mesa.

10. Hacer slowroll.

Retrasar un call a un all-in teniendo las nuts, como regodeándote de ello, para luego pagar y enseñar las cartas es, para muchos jugadores, una acción de pésima educación. Aunque en Macao se diviertan con ello, en el mundo occidental, el slowroll es una falta de respeto que puede marcarte durante mucho tiempo.

¿Se te ocurren más acciones tí­picas de los bad boys del poker?