Navegando por la Red, me he encontrado hoy con un artículo muy interesante de Dara O’Kearney sobre los fallos más habituales que comenten los jugadores (fundamentalmente recreacionales) de poker en vivo.
O’Kearney comenta que por regla general, los jugadores del vivo tienden a cometer dos errores graves fácilmente explotables, especialmente para los jugadores profesionales de poker online.
El primero es que los «live players» suelen dar más importancia que los online a seguir vivos en el torneo.
O’Kearney se justifica afirmando que mientras un pro de los MTT online puede jugar de 10.000 a 20.000 torneos al año, un jugador recreacional del vivo quizá llegue a disputar una docena. Por ello, este último, que disfruta de vivir la experiencia en las mesas, no quiere bustear en la primera mano o al principio de un torneo, y suele querer pasar prácticamente a toda costa el primer corte si se trata de un evento de varios días. Juega con dos objetivos: entrar en premios y estar en el torneo el máximo tiempo posible.
La mentalidad de los pros online es completamente distinta. Los torneos no suelen tener para ellos tantas implicaciones emocionales. Constituyen un hito en su plan de trabajo.
Por todo ello, O’Kearney recomienda presionar a los «live players» que cometen este error en los momentos de mayor tensión para ellos, es decir, al principio de un torneo o en las burbujas (de premios o de mesa final). No suelen encontrarse cómodos en botes grandes o cuando se les mete presión, y pueden foldear manos decentes ante intentos de farol. Para asumir grandes riesgos han de llevar manos muy fuertes.
El segundo error que según O’Kearney suelen cometer los jugadores no profesionales del vivo es que no toman sus decisiones en función de las matemáticas del poker. Generalmente, tienen más en cuenta su mano y su stack. Ello les lleva a gestionar mal sus compromisos con el bote, a hacer calls contra odds o a realizar folds increíbles tras invertir grandes cantidades de fichas por el miedo a caer eliminados. O’Kearney cree que muchos jugadores del vivo no conocen bien conceptos como las odds, los porcentajes, las equities o las expectativas.
Este segundo leak no es tan fácilmente explotable por los regs online. Aunque pueden encontrar folding equities en spots inesperados, también se pueden topar con calls impensables en situaciones «aparentemente claras». En ocasiones, puede ser complicado realizar los ajustes necesarios para poder aprovechar este leak.
Aparte de estos fallos, O’Kearney habla de otros no tan graves que también suelen cometer los recreacionales del vivo:
- Realización de «subidas por información», sin saber que no es una buena acción.
- Falta de precisión en el recuento de los stacks (el propio y los de los demás).
- Desconocimiento del concepto de stack efectivo a la hora de tomar decisiones (se guían por su propio stack).
- Sobrevaloración de las manos con los que los rivales juegan botes grandes (lo que les lleva a pagar los all-ins de los rivales con rangos más tight de los rentales).
- Reducción de la frecuencia de movimientos orientados a la steal equity (apenas realizan 3B light y casi nunca 4B o 5B de derribo).
- Comentario en la misma mesa de manos anteriores, ofreciendo información valiosísima sobre su estilo de juego y su proceso de toma de decisiones.
- Falta de variación en situaciones similares (casi siempre juegan spots parecidos de la misma manera).
- Asunción de que los rivales juegan exactamente igual que ellos las distintas situaciones.
- Toma de decisiones teniendo muy en cuenta los tells que creen encontrar.
Aunque lo parece, el objetivo del artículo no es minusvalorar a los «live players» y ensalzar a los online. Creo O’Kearney que pretende poner de relieve algunos de los fallos que considera que suelen cometer los no profesionales de vivo, de la misma forma que podría comentar los que cometen los online que son novatos en los eventos presenciales.
¿Añadirías algo a su lista?
