Malta, uno de los reguladores de juego online más activos de Europa, parece ser el origen de las operaciones de una amplia red de juego ilegal que ha sido desmantelada por la policía italiana, según indican pruebas presentadas ante la fiscalía general de Florencia.
La operación, denominada Double Jack, conllevó la vigilancia de alrededor de 30 entidades de juego físico y online, y concluyó con el registro de 14 locales situadas en diferentes provincias a lo largo de todo el país.y la intervención de varias cuentas bancarias
Las incautaciones han superado los 10.000.000$ y se calcula que el conjunto de toda la operación generaba unos ingresos superiores a los 12.000.000$ al mes.
La parte más delicada de la operación ha sido descifrar la estructura del negocio. Para llegar a la raíz de las operaciones de la organización, la policía italiana introdujo un troyano en en la red informática utilizada como plataforma para el juego. Gracias al virus, se pudo enrutar todo el tráfico hacia unos servidores situados en Malta.
En los locales allanados se han encontrado sistemas que permitían a los operadores cortar de inmediato toda conexión con los servidores de Malta, en los que al parecer se hacía correr un software manipulado para que los jugadores no pudieran ganar de manera habitual.
Esta operación contra el juego ilegal va a ser una de las últimas enlas que las autoridades italianas van a poder utilizar métodos así de agresivos, antes de que entre en vigor la nueva ley que impide utilizar herramien informáticas invasivas para investigar delitos.A día de hoy, las pruebas obtenidas con estos métodos son perfectamente aceptables para el fiscal general de Florencia, Giuseppe Creazzo, que se ha quejado de la falta de cooperación de las autoridades maltesas.
Malta es el regulador europeo que emite más licencias. Desde la isla mediterránea se apostó por atraer inversión externa a través de rebajas fiscales, y encontró un filón con las empresas de juego online. En el informe económico oficial sobre el primer trimestre de 2017, las autoridades maltesas revelan que un 12% de la economía de la isla se produce gracias a este sector.
El esfuerzo legislativo de la Unión Europea para el juego online siempre ha encontrado una oposición frontal desde Malta, que intenta proteger a toda costa esa vital aportacón a sus arcas por parte de los operadores que mantienen sus servidores en su país. Todas las modificaciones del llamado Libro Verde del juego online y de las leyes antiblanquo que afectan al sector han sido contestadas por europarlamentarios que representan a la isla ante la Comisión Europea.
Las jurisdicciones que mantienen un mercado cerrado se quejan de la falta de rigor en la supervisión de las operaciones de estas empresas, y casos como el que nos ocupa no hacen más que alimentar el resentimiento entre las entidades reguladoras. No es la primera vez que se puede probar la relación de grupos delictivos con compañías que actúan bajo el paraguas regulador de Malta. En otra operación efectuada en 2015, la justicia italiana logró cerrar una red de juego ilegal relacionada con la mafia calabresa y cerró la operación con 41 detenciones, el decomiso de 2.000 millones de euros, la extradición de seis italianos de Malta y el cierre de varios operadores con licencia en la isla.
A lo largo de la última década se han venido filtrando declaraciones de ex-empleados que no dejan nada bien a la entidad reguladora maltesa. Por ejemplo, uno de ellos, identificado con nombre y apellidos por el diario alemán Spiegel Online, denunció que «si tenían el enchufe adecuado, ha habido compañías que han podido operar desde la isla durante años sin ningún tipo de control. Los sistemas de información no eran convenientemente auditados, y es posible que haya desaparecido dinero».
Pese a todo, la Unión Europea considera que la regulación bajo la que se otorgan licencias en Malta cumple con todos los requisitos, y desde luego sobre el pael es así, y sus licencias se aceptan en muchos países del mundo.
