Las elecciones presidenciales en Estados Unidos están resultando mucho más reñidas de lo esperado.
La gente a la que le gusta estar informada de lo que pasa en el mundo está aprendiendo nuevos términos, como el «blue shift» o el «red shift». Es tradición que el panorama del voto en EE.UU. se pinte en los medios con dos colores, rojo para los republicanos y azul para los demócratas. El voto por correo, mucho más significativo debido a la pandemia, puede decidir el ganador final si logra hacer cambiar el color de alguno de los estados.
La intriga va a durar horas, si no días.
Muchos ciudadanos de aquel país creen jugarse mucho en esta elección. En el titular, la pregunta que nos hacemos es si los jugadores de poker online de Estados Unidos deberían contarse entre ellos.
En el podcast The Orbit, amparado por CardPlayer, se le trasladó esta misma pregunta a los cuatro participantes, entre los que había gente muy cualificada para responder.
Eran Kristen Bicknell, la única que declinó responder la pregunta, el fundador de Pokernews Tony G, el presidente del World Poker Tour Adam Pliska y Toby Bentall, el CEO de Oddschecker Media, una división del Stars Group.
Tony G
Opino que Biden es mejor. He apostado un montón por su victoria, así que espero que salga bien.
Por lo que yo entiendo, tal y como se ve el mercado, creo que Biden es mejor. Simplemente porque Sheldon Adelson respalda a Trump. Siempre va a intentar frenar el ppoker online. Esa relación no es sana para el sector.
Los jugadores de poker probablemente deberían esperar que ganara Biden, aunque tampoco es que sea muy diferente.
Toby Bentall
Pienso que no importa. Estoy hablando en concreto del poker online. Da bastante igual.
Desde mi punto de vista, la clave para que el poker online pueda extenderse a través de los EE.UU. reside en el éxito de las apuestas deportivas online. Esa es la clave, y el presidente no importa.
Adam Pliska
Lo que voy a decir lo hago en mi condición de abogado, y como alguien que ha hecho lobby en el Congreso. No creo que tenga tanta importancia como la gente piensa.
Al final del día, va a ser un asunto estatal. De los estados y de su regulación. Lo rápido que puedan montar esos mercados y lo eficientes que los hagan será lo que determine el entusiasmo y el apoyo que obtendremos.
Si alguien encuentra la solución a nivel regulatorio para que las empresas ganen dinero suficiente y se tenga la impresión de que se están generando beneficios, entonces habrá voluntad para darle al poker online el impuslo que necesita.
Los máximos representantes de la industria parecen coincidir en que no hay perspectivas de un cambio radical en el estado actual del poker online en EE.UU.
El desarrollo del sector va a seguir dependiendo de la iniciativa estatal, aunque sí que es cierto de que en caso de que vuelva a ganar Trump en cualquier momento le quiera echar un hueso a Sheldon Adelson, como cuando el Departamento de Justicia revocó el dictamen del informe sobre la Wire Act que permitió que los estados empezaran a regular el poker online en sus territorios.
Esa sería la pequeña diferencia, auqnue Adelson pareceestar estudiando la venta de todas sus propiedades en Estados Unids para centrarse en otros negocios y otros territorios, lo que borraría de la ecuación al actor que más interés pone en la prohibición del poker online en el país.