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Ben Lamb y Sam Greenwood viven las dos caras de los Challenges de los Aussie Millions

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Los Challenges de los Aussie Millions marcaron en su dí­a el inicio de la época dorada de los High Rollers. El atrevimiento de poner varios torneos de buy-ins que a principios de la década eran exorbitantes de 25.000$ a 250.000$ le granjeó al festival del Crown Casino una categorí­a especial en el circuito.

En la actualidad son docenas de festivales los que programan torneos del estilo. Igual que en su dí­a marcaron el inicio de una era, es preocupante ver como los Challenges están agonizando. Es una muerte lenta, dolorosa y nada agradable a la vista.

En 2016 quedó sentenciado el 250.000$ Challenge, suspendido por falta de jugadores, y quien más y quien menos andaba con la mosca detrás de la oreja por lo que pudiera pasar este año con el 100.000$ Challenge. El palo ha sido más duro aún, y el descalabro ha llegado en un torneo incluso más «modesto», el 50.000$ Challenge.

A la hora de la verdad, solo se sentaron a jugar cuatro personas, aunque se retrasó el inicio del torneo unas dos horas a la espera de que aparecieran los menos madrugadores. La dirección ni se molestó en anunciar premios. Alex Foxen, Jan Eric Schwippert y Sam Greenwood abrieron el torneo en mesa de tres, y jugaron durante dos niveles antes de que se animara a sentarse Koji Fujimoto.

Cuando quedaron eliminados los jugadores menos habituales en los High Rollers, Foxen y Fujimoto; se cerró un rápido pacto entre los otros dos, Schwippert (77.600AUS$) y Greenwood (116.400AUS$). Esa fue toda la historia de tristí­simo 50.000$ Challenge. La pantomima se trasladó a las redes sociales, en las que Greenwood arremetió contra los High Rollers alemanes que estuvieron revoloteando por el salón de juegos a la espera de que entrara más dinero muerto y que finalmente ni se sentaron. El canadiense les tildó de «buitres», «depredadores» y «cobardes».

No fue nada bonito, la verdad, y borró de un plumazo el buen sabor de boca que sí­ logró dejar el 25.000$ Challenge, donde hubo 114 registros.

Kitty Kuo estuvo encantadora y ejerció de perfecta chipleader del dí­a 1, dando entrevistas y posando para la foto con mucha generosidad. Tuvo el merecido premio de una mesa final en la que Ben Lamb y Jan -Eric Schwippert manejaban enormes torres de fichas. Mustapha Kanit fue ví­ctima de un enfrentamiento entre shortstacks, pero a partir de entonces toda la partida se centró en conocer el orden en que Ben Lamb y Schwippert iban a ir eliminando a sus rivales.

El último en caer fue el campeón del High Roller del ACOP 2017 Wayne Yap, y en cuanto cumplieron con el trámite, Lamb y Schwippert firmaron un reparto casi equitativo del dinero y flipearon por el anillo de campeón.

  1. Ben Lamb 524.764$*
  2. Jan-Eric Schwippert 484.746$*
  3. Wayne Yap 265.939$
  4. Kitty Kuo 199.454$
  5. Jack Salter 144.050$
  6. Roger Teska 99.727$

En el evento principal de 10.000$, que ahora mismo disputa su dí­a 1B, se acaba de confirmar que se han superado las 400 entradas, y aún queda una tanda de participantes por saltar al ruedo en la madrugada del lunes al martes, por lo que el éxito está asegurado.

Sin embargo, es probable que se produzca otro fiasco en el 100.000$ Challenge. Serí­a de agradecer que de no cumplirse las expectativas de afluencia -que no deben ser ya muy altas después de lo vito en el 50K y de las 18 entradas vendidas en 2017 tras un aplazamiento-, se optara por la suspensión del torneo, como se hizo en su dí­a con el 250.000$ Challenge. Si la hay otro remedio, mejor cortar por lo sano

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