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Spiderman, o mejor dicho, Tobey Maguire, tendrá que hacer frente a una multa de 80.000$ por su participación en unas partidas caseras que han resultado ser parte de una historia un tanto turbia.

El actor californiano, que ha participado en otras cintas como «Las normas de la casa de la sidra», «Seabiscuit» o «Pleasentville«, disputó durante largo tiempo una serie de timbas high stakes en la que habí­a un gran número de famosos. Allí­ fue capaz de obtener cerca de 36 millones de dólares durante tres años.

La historia se vuelve un tanto oscura al hablar de Brad Ruderman, uno de los participantes en estos juegos. Este empresario estadounidense, director de Ruderman Capital Partners, empleaba el dinero de sus clientes para llevar un lujoso estilo de vida. Además, por supuesto, de sentarse en las mencionadas partidas.

Entre una cosa y otra se apropió de cerca de 25 millones de dólares. Esa fue la pista que llevó al FBI a las partidas. Fue entonces cuando acusaron a Maguire de ser partí­cipe en esa estafa, que las autoridades no dudaron en catalogar de esquema Ponzi.

Maguire intentó convencer al jurado de que nada tení­a que ver con esa estafa, y que él habí­a obtenido su dinero de forma legal. Para ello enseñó varios cheques en los que se informaba de varios pagos realizados a Ruderman.

Pero la prueba no convenció al jurado y Maguire, aconsejado por su abogado, decidió aceptar la minuta y olvidarse del caso.

Ruderman, por su parte, cumple una condena de 10 años de prisión. Y es que, además de desfalcar 25 millones de Ruderman Capital Partners, ya estaba siendo investigado por otra estafa de 40 millones de dólares.

Howard Ehrenberg, el abogado del grupo de damnificados, aseguró que el acuerdo de Maguire «no es mejor que el de otros acusados» y explicó que la demanda presentada en febrero de este año trata de recuperar 1,7 millones de los clientes de Ruderman.

Del resto de acusados; Nick Cassavetes, Alec Gore y Gabe Kaplan todaví­a están pendientes de una resolución. Los dos últimos también han accedido a pagar sendas multas, de 49.900$ y 26.900$, respectivamente, que se reembolsarán a los socios de Ruderman.

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